"Roma ya no está en Roma: tendría que parecer o igualarse en adelante a la mitad del mundo", decía el Adriano de Marguerite Yourcenar.
Esta misma sensación del emperador la revivimos hoy leyendo la autobiografía que Maria Antonietta Macciochi acaba de publicar en Italia y Francia simultáneamente. También para ella, dos mil años después, Roma ha dejado de estar en Roma...